La gran diversidad de peces se ve amenazada principalmente por la gran presión que ejerce el uso de métodos ilícitos en la pesca industrial y artesanal, en las que se puede capturar una gran proporción de peces juveniles, o en dónde se capturan especies con algún grado de amenaza con mayor frecuencia. Los humanos ejercemos presión constante sobre los ecosistemas dónde viven estas especies.
Generar oportunidades económicas justas para los habitantes costeros, buscando el equilibrio entre el crecimiento económico, el cuidado de los océanos y el bienestar social es nuestro propósito. Buscamos satisfacer las necesidades actuales de alimentarnos, sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras de satisfacer las suyas.